Cuando salí por primera vez con Karina, ella sabia que era pareja de su amiga Doris y yo sabia que ella tenia un amante que trabaja fuera de lima y que la visita dos veces por semana. Todo andaba muy claro desde el principio así que sabíamos perfectamente como podía terminar ese encuentro. Las horas y los tragos iban transcurriendo, el bar donde bebíamos estaba lleno de parejas y al frente había un hotel que se llamaba “Pecados” donde cada veinte minutos una pareja salía o entraba, incluso algunas parejas del bar pagaban la cuenta y se metían a aquel hotel para completar la noche.
Era casi medianoche cuando el celular de Karina suena, era su amiga de cuarto Cecilia, diciéndole que no vaya al departamento porque aun esta ahí con su novio y que van a tardar un par de horas mas. Karina me cuenta el impase y yo mientras veo otra pareja entrar al hotel, con algo subido de copas, encendido en mi hombría y voluntad por terminar la noche, tomo un buen sorbo de cerveza y le digo mirándola fijamente a los ojos: “Todos estas cogiendo menos nosotros…te importaría seguir a la manada??”.
Karina me mira, ríe a carcajadas de mi comentario atrevido, me toma de la mano y me dice que pida dos cervezas mas para llevarlas al hotel y seguir la fiesta adentro de la habitación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario